ENTREVISTA: Inversión extranjera en América Latina debe impulsar cambio estructural progresivo, aconseja CEPAL

Latinoamérica requiere de una inversión extranjera directa (IED) que impulse un cambio estructural progresivo, en el que China puede participar con ventajas, dado su conocimiento en ciencia, tecnología e innovación, y su experiencia en energías renovables, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

"Creemos que hay que articular la inversión extranjera directa a una estrategia de desarrollo productivo, a una política industrial, y avanzar en sectores como la sostenibilidad ambiental, la industria de la salud (...) y la bioeconomía, cambiando el paradigma de desarrollo hacia una mayor sostenibilidad", afirmó la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.

Bárcena ofreció una entrevista a Xinhua tras la presentación del informe anual "La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe 2020", divulgado la semana anterior.

El informe anticipa una caída de hasta el 55 por ciento en la IED en 2020 en la región, golpeada por la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19), tras disminuir un 7,8 por ciento en 2019.

La secretaria ejecutiva de la CEPAL aseguró en este contexto que la región ha sido atractiva para los capitales extranjeros desde inicios de la década anterior, por su riqueza en recursos naturales.

Esta inversión, sobre todo europea y estadounidense, "no catalizó cambios importantes en nuestra estructura productiva, en todo caso, afirmó esa estructura productiva y la agravó incluso un poco más", dijo.

De acuerdo con Bárcena, una de las falencias es la infraestructura en salud, que quedó en evidencia con la llegada de la pandemia de la COVID-19, ya que la región importa el 94 por ciento de los equipamientos médicos que utiliza.

"Es muy importante apuntalar un sector como son los dispositivos médicos, una industria manufacturera muy estratégica", explicó Bárcena, con la idea de crear cadenas de valor regionales "óptimas".

Planteó en esa línea la necesidad de contar con flujos extranjeros para el desarrollo de ésta y otras industrias regionales.

"Al producir en la región se van creando capacidades locales, laborales, aumentando la productividad del empleo", dijo la representante de la CEPAL, luego de que la crisis sanitaria y económica destruyó millones de puestos de trabajo en la región, lo que incrementó la desocupación y la pobreza.

Frente a este escenario, la secretaria ejecutiva de la CEPAL valoró la estrategia de desarrollo productivo de China hacia el interior.

Dijo que ello puede traer enseñanzas y un mayor progreso a los países de América Latina y el Caribe, a través de sus inversiones y la creación de empresas en sectores clave.

China es en la actualidad el tercer inversionista extranjero en la región, concentrándose mayormente en fusiones y adquisiciones de compañías entre 2005 y 2020, sobre todo en sectores de energía, minería y transporte, con mayor apuesta por proyectos sostenibles.

"China está cambiando su estrategia. Ya no sólo quiere comprar materias primas, sino que está dispuesto a invertir, aunque obviamente está la tendencia a fusiones y adquisiciones", por lo que "deberíamos dar un paso más allá hacia la creación de empresas nuevas", según la explicación de Bárcena.

El objetivo es contribuir a la innovación tecnológica en las industrias mencionadas, así como en conectividad mediante iniciativas ligadas a tecnología 5G (quinta generación) y al salto productivo de la agroindustria, en vista de que el país asiático es un gran comprador de alimentos y cuenta con un mercado potencial de más de 1.400 millones de personas, agregó.

"Qué mejor que producir los alimentos acá en la región y de ahí exportarlos. La pregunta es qué deben hacer los países de la Alianza del Pacífico (AP), por ejemplo, para unir esfuerzos y potenciar justamente el desarrollo que se podría dar con China", primer socio comercial de Sudamérica, según la secretaria ejecutiva de la CEPAL.

Señaló al respecto que la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China es "muy atractiva" en materia de integración regional, con ejemplos exitosos en conectividad digital y ferroviaria, que pueden ser extrapolados a la región latinoamericana, además de los conocimientos y avances del país asiático en el sector aeroespacial.

"Lo interesante es que la Franja y la Ruta se ha integrado totalmente a la Agenda 2030. En parte, sus proyectos están siendo muy asociados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, por ejemplo, al objetivo 9, que se refiere a la industrialización e infraestructura, que es algo que se está tomando en cuenta allí", comentó.

Respecto a Chile, Bárcena destacó la "relación políticamente estratégica" entre el país austral y su principal socio comercial, con "importantes inversiones chinas" anunciadas durante los últimos meses en infraestructura, agroindustria, servicios globales y energía.

Según el informe de la CEPAL, los montos de IED disminuirán a nivel mundial en 40 por ciento en 2020, así como entre el 5 y el 10 por ciento en 2021. De esta manera, las inversiones foráneas alcanzarán en 2021 su menor valor desde 2005.