América Latina atraída por los beneficios de la RCEP
BEIJING, 24 jun (Xinhua) -- La solicitud de Chile para unirse a la RCEP demuestra el enorme atractivo del mecanismo como la zona de libre comercio más grande del mundo, indica un artículo recientemente publicado por el Diario Económico de China.
La Asociación Económica Integral Regional o RCEP ("Regional Comprehensive Economic Partnership", en inglés) es un acuerdo comercial multilateral firmado entre 15 países del Asia Pacífico, entre ellos las 10 economías de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés), China, Japón, República de Corea, Australia y Nueva Zelandia.
La solicitud de la adhesión de Chile al organismo muestra, a su vez, que el multilateralismo todavía es ampliamente reconocido por la comunidad internacional, señala el artículo.
Durante una reciente visita a Indonesia, Claudia Sanhueza, subsecretaria chilena de Relaciones Económicas internacionales, presentó a Satvinder Singh, subsecretario general de la Comunidad Económica de la ASEAN, una carta de solicitud formal para la participación chilena en la RCEP.
En los últimos años, la Organización Mundial del Comercio (OMC) ha tenido dificultades para funcionar debido a la interferencia y el sabotaje de ciertos países. Los mecanismos comerciales multilaterales como la RCEP han desempeñado un papel destacado en la promoción de la recuperación económica global y el mantenimiento de la globalización económica, analiza el texto.
Desde que la RCEP entró en vigor oficialmente, ha promovido de manera significativa la apertura y la cooperación en la región y estimulado la vitalidad del desarrollo económico regional. Los datos muestran que en 2023, el comercio intrarregional dentro del marco del mecanismo alcanzó los 5,6 billones de dólares y atrajo un total de 234.100 millones de dólares en inversiones nuevas, 2,2 veces más que la cifra registrada en 2021.
Por otro lado, la RCEP también ha promovido eficazmente el desarrollo de la globalización económica y la integración de la economía regional, y ha impulsado la confianza de la comunidad internacional en el multilateralismo.
El Informe anual 2024 sobre las perspectivas económicas y el progreso de la integración de Asia, publicado durante la Conferencia Anual del Foro de Boao para Asia de este año, señaló que desde la implementación de la RCEP, la cooperación en las cadenas industriales y de suministro de sus miembros ha mostrado una fuerte resiliencia.
Además, los países integrantes de la zona de libre comercio no solo se han beneficiado significativamente de ella, sino que también se han producido efectos positivos de derrame y de demostración , mitigando efectivamente el impacto adverso de la "fragmentación" de la economía mundial, comenta el texto.
De acuerdo con opiniones expertas, la cooperación dentro de la RCEP ha logrado resultados sobresalientes, ha producido un efecto positivo como una demostración y ha sido cada vez más atractiva para la comunidad internacional. Según informes de medios extranjeros, además de Chile, países como Sri Lanka y Bangladesh también han expresado su firme intención de unirse.
Atraer a más países para que se unan creará una situación en la que todos saldrán ganando, destaca el artículo.
La incorporación de más miembros ayudará a la RCEP a llevar a cabo una cooperación económica y comercial a mayor escala, en campos de mayor amplitud y a un nivel más alto, al tiempo que los miembros podrán aprovechar conjuntamente el potencial económico regional y responder a los desafíos globales.
Con la participación de Chile, el alcance de la cooperación del mecanismo se extenderá a América Latina y, simultáneamente, se enriquecerán las opciones comerciales de cada miembro.
El texto resalta que este es el acuerdo de libre comercio con la mayor población participante, mayor escala económica y comercial y mayor potencial de desarrollo del mundo.
Incorporarse a él significa que la cooperación económica y comercial entre las múltiples economías de la región disfrutarán de más protección y garantías en campos como la facilitación del comercio, los aranceles, las inversiones y la colaboración económica y tecnológica, entre otros.
Chile es uno de los países que ha firmado más tratados de libre comercio (TLC) en el mundo. De hecho, los ha suscrito con múltiples miembros de la RCEP, entre ellos China, Australia y la República de Corea, de manera que ya cuenta con una sólida base para su proyectada adhesión.
Si la incorporación de Chile resulta exitosa, verá que su fluidez comercial con los actuales miembros aumentará significativamente, a la vez que la escala de su comercio crecerá y las categorías de este presentarán más diversidad, concluye el artículo.