ESPECIAL: Peleadores cubanos buscan elevar nivel en la práctica del boxeo chino
Imagen del 18 de junio de 2022 de atletas cubanos participando durante una práctica de sanda en un recinto deportivo, en el municipio de Regla, en La Habana, capital de Cuba. (XinhuaJoaquín Hernández)
LA HABANA, 28 ene (Xinhua) -- Un grupo de jóvenes, entusiastas practicantes del Sanda, o boxeo chino, prosiguen sus esfuerzos para elevar el nivel en la práctica de ese deporte que trata de abrirse camino en Cuba.
En un país donde el béisbol, el boxeo y el fútbol acaparan la atención de la mayoría de la afición, el boxeo chino trabaja para hacerse un espacio en el favoritismo de los amantes del deporte.
Por cuarta ocasión, los practicantes de esa disciplina, novedosa para la isla caribeña, se dieron cita este fin de semana en un torneo de artes marciales mixtas.
"Esta es la Liga de Peleadores Cubanos, la cual nos brinda la posibilidad de crear un ranking competitivo para eventos de carácter internacional y nacional", dijo a Xinhua el presidente de la Academia Cubana de Wushu Sanda, Frank Cazon, un cincuentón macizo y de mediana estatura.
Licenciado en Cultura Física por la Universidad de La Habana, Cazon está convencido de que la explosividad y resistencia innatas de los cubanos pueden ser una ventaja a la hora de practicar ese tipo de disciplina de combate.
"Buscamos que el nivel competitivo entre las artes marciales chinas en el país, incluyendo el Sanda y otras disciplinas como Combate integral y el Grappling, que también son modalidades que están incluidas dentro de este proyecto, pueda de esta manera crecer con una visión competitiva internacional", agregó.
Cazon tiene la sede de la Academia en una estrecha calle del ultramarino pueblo de Regla, en la capital cubana, donde cada día asisten unas 50 personas de todas las edades, no solo para aprender a pelear, sino, subrayó, para adquirir valores y disciplina, además de crecer ante las dificultades.
El desarrollo del Sanda en Cuba se aprecia de manera particular en las categorías infantiles, a las que Cazon consideró como la base del futuro de la disciplina
Desde las tribunas, la competición era seguida con emocionada atención por la niña Yuslaide Crespo, de 11 años, quien acompañada por sus padres asistió por primera vez a una competencia de ese tipo.
"Me emocioné mucho cuando el niño de la esquina roja ganó su pelea", explicó la niña en referencia a Raydel Escalona, quien enfrentó a Alain Ochoa en un combate infantil de exhibición, que despertó los ánimos del graderío.
Como casi siempre sucede en los estadios cubanos con las disciplinas de combate, la velada atrajo la atención de un público que se implicó con entusiasmo en el apoyo a uno u otro de los contendientes.
La intención de la Academia ahora es extender la práctica de la disciplina a todas las provincias del país, pues en la actualidad hay unos 600 practicantes de ese arte marcial chino, fundamentalmente en las provincias orientales de Santiago de Cuba y Granma, así como en la capital, donde reside la mayoría de los atletas.
La práctica del boxeo chino comenzó en Cuba en el año 2000, luego de que Cazon y un grupo de amantes de las artes marciales decidieran aventurarse en el empeño de dedicarse a la práctica del Sanda.
La Academia Cubana de Wushu Sanda integra la Asociación Cubana de Artes Marciales, reconocida por el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación de Cuba, y afiliada a la correspondiente Asociación Panamericana.