Empresario uruguayo saborea el éxito en comercio de carne en China
El 7 de noviembre de 2022, en la V Exposición Internacional de Importaciones de China, celebrada en Shanghai, al este del país, expositores uruguayos de carne de res y cordero conversaron con distintos comerciantes. (Xinhua / Liu ying)
HEFEI, 8 dic (Xinhua) -- Mientras los filetes chisporrotean en la parrilla, la pantalla fijada a la pared muestra videos sobre su origen, las vastas praderas de Uruguay. Esta escena cotidiana de un restaurante ubicado en Wuhu, ciudad de la provincia oriental china de Anhui, atrae a numerosos clientes a disfrutar los platos típicos del país sudamericano.
Con la continua profundización de la cooperación económica, comercial y agrícola entre China y Uruguay, Gabriel Martín, empresario uruguayo y propietario del local, ha logrado ampliar su negocio de carne en China.
En 2008, los Juegos Olímpicos de Beijing concentraron la atención mundial, y al mismo tiempo despertaron el interés de este joven por el lejano país oriental. Entonces con 24 años, Martín quedó impresionado al ver los Olímpicos por televisión y se enamoró de China por su prosperidad, belleza y seguridad, y también por su habilidad para organizar eventos del más alto nivel.
"Quiero hacer de China el próximo destino de mi vida", declaró, y en 2012 llegó a Shanghai para estudiar.
Al observar el vasto mercado de consumo y el enorme potencial de China, Martin comenzó a explorar oportunidades para la comercialización de la carne de res.
En aquel entonces, los chinos estaban muy al tanto de la calidad futbolística de Uruguay, pero poco sabían de la de sus carnes. En los comienzos de su negocio, Martín recorría la metrópoli oriental china en bicicleta para presentar la carne vacuna de su país a supermercados y restaurantes.
El esfuerzo se vio recompensado, y ocho meses después, Martín consiguió su primer cliente. Además, su quehacer comercial tuvo para él un resultado sorpresivo, pues en medio de su labor conoció y se enamoró de Zhang Jin, una joven china que luego se convirtió en su esposa.
En ese momento, Zhang se dedicaba a la importación y comercialización de vinos en Shanghai. Ella suele bromear que así como el vino tinto va con las carnes rojas, ella y Martín son la pareja perfecta.
En 2017, la pareja se instaló Wuhu, la ciudad natal de Zhang, donde siguieron su comercio de carne de res y abrieron un restaurante especializado en carnes uruguayas.
"En aquel entonces, esta zona acababa de comenzar la renovación y la construcción y todavía estaba desolada, pero no dudé al tomar la decisión de venir aquí, porque confiaba en las capacidades de planificación y ejecución del Gobierno chino y creía que este lugar se desarrollaría mejor", rememora Martín.
Gran parte de la confianza de Martín proviene de su afición a la lectura de noticias, que consume casi todo su tiempo libre.
"Cuanto más leo, más admiro y amo a China. Es algo grandioso que este país con una población tan grande pueda lograr un desarrollo urbano y rural equilibrado", sostiene.
Orgulloso de la calidad de la carne uruguaya, Martín observó que a medida que el nivel económico de China continúa mejorando, la demanda de la gente por alimentos de calidad, incluida la carne importada, también es cada vez mayor.
Este año se cumple el 35º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Uruguay. En noviembre, los dos países firmaron el Plan de Cooperación Bilateral para el Fomento de la Construcción Conjunta de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, además de otros documentos de cooperación bilateral en campos como comercio e inversión, economía digital, desarrollo verde, agricultura, salud, educación, cultura, innovación científico-tecnológica e inspección y cuarentena en aduanas.
En materia del acceso al mercado de productos cárnicos, los dos países firmaron cinco nuevos protocolos sanitarios, incluido un protocolo actualizado que permite la exportación uruguaya de despojos de vacuno, lo que supone un avance importante para esa industria uruguaya.
"Creo que el acuerdo al que llegaron los dos países puede mejorar mucho la oferta de despojos de vacuno en el mercado chino. Se espera que aumente alrededor de 150 millones de dólares cada año en valor agregado a las fábricas y productores de carne uruguayos", manifiesta Martín.
Pero a pesar de sus ya varios años de experiencia comerciando carne en China, Martín sigue explorando nuevos mercados. Claro, a diferencia de los días en que andaba en bicicleta, ahora viaja en trenes de alta velocidad y en avión, visitando las principales ciudades de China, incluidas Zhengzhou, Tianjin y Shenzhen, para negociar con diferentes empresas e importadores de renombre.
Solo en septiembre, el empresario uruguayo importó diez contenedores de carne vacuna desde su país. Mientras tanto, trabaja en la adecuación de su segundo restaurante en Zhengzhou, la capital de la provincia de Henan, y al mismo tiempo prepara el lanzamiento, en fecha próxima, de su negocio en línea.
Martín asegura que a medida que la cooperación entre Uruguay y China continúa expandiéndose, él tiene cada vez más confianza en el futuro del comercio de carne vacuna uruguaya en el gigante asiático.