ENTREVISTA: Experiencia y unidades de fabricación china reaniman electromovilidad en transporte público de capital mexicana
Imagen del 4 de marzo de 2021 de un trolebús fabricado en China circulando por una calle en la Ciudad de México, capital de México. (Xinhua/Francisco Cañedo)
MÉXICO, 30 abr (Xinhua) -- El director general del Servicio de Transportes Eléctricos (STE) de la Ciudad de México, Martín López, rememoró en entrevista con Xinhua su admiración cuando visitó la ciudad oriental china de Shanghai hace cuatro años y fue testigo del auge e impacto positivo de la electromovilidad en el transporte público de la urbe, que cuenta con una población de más de 24 millones de habitantes.
En su opinión, la experiencia de China en el desarrollo verde de su sistema de transporte público y la calidad de las unidades que fabrica han motivado la adquisición de autobuses, trolebuses y otros medios de transporte para reanimar y dar un nuevo empuje a la electromovilidad del transporte público de la capital mexicana.
Con más de 30 años de trayectoria en el sistema de transporte público de la Ciudad de México, López fue invitado a China, en representación del STE, para participar en un evento de electromovilidad donde algunos proveedores hicieron presentaciones de sus productos y servicios para el transporte urbano.
Presenció la prevalencia de la electromovilidad en Shanghai, algo que ha estado presente desde hace tiempo en la capital mexicana en algunos medios de transporte, pero no con el volumen del país asiático.
López explicó a Xinhua que, gracias a la adquisición de trolebuses y otros medios fabricados por la empresa china Yutong, la electromovilidad en el transporte público de la Ciudad de México se ha fortalecido en los últimos años.
La urbe mexicana tiene una población de más de nueve millones de habitantes y, en ella, más de cinco millones de pasajeros en promedio hacen un uso diario de los distintos medios de transporte masivo.
El fortalecimiento de la electromovilidad permite a los usuarios del transporte público disponer para su desplazamiento de medios cómodos, eficientes, amigables con el medio ambiente y respetuosos con el desarrollo verde, justo como sucede en Shanghai, según López.
La ciudad china, destacó el director general del STE, tiene "un desarrollo y una integración impresionantes", al alcance también de la capital mexicana con buenas prácticas y aprendizaje de las mejores experiencias de Shanghai.
El STE de la Ciudad de México gestiona una red de trolebuses de 10 líneas, un tren ligero y dos líneas de Cablebús (teleférico).
La red de trolebuses cuenta en estos momentos con 301 unidades de fabricación china. Para el próximo año, se prevé la apertura de una nueva línea que operará en la capital mexicana y el vecino estado de México, para cuya puesta en marcha el STE ya adquirió 102 trolebuses articulados de Yutong.
Para el tren ligero, otro de los sistemas de transporte emblemáticos de la empresa, está prevista la llegada de nueve unidades a finales de 2023 y de otras ocho en el primer trimestre de 2024, todas fabricadas en China.
López reconoció que la calidad de las unidades chinas satisface mucho por ser "de primer nivel" para tratar de recuperar y superar la cifra de 130.000 pasajeros diarios.
Las unidades chinas, añadió, "han tenido un desempeño totalmente favorable". Tienen una "tecnología de vanguardia" y son "más cómodas, más seguras, pero, sobre todo, más eficientes para los ciudadanos" en comparación con las que había anteriormente, declaró a Xinhua.
Imagen del 4 de marzo de 2021 de trolebuses fabricados en China circulando por una calle en la Ciudad de México, capital de México. (Xinhua/Francisco Cañedo)
Su implementación en la red de trolebuses ha beneficiado a los usuarios, que experimentan ahorros notorios del tiempo en sus desplazamientos, enfatizó el funcionario.
Personal del área de Transportación del STE tiene contabilizado que, con las unidades anteriores, el tiempo de ciclo (una vuelta completa) de la línea de trolebús que circula por el Eje Central superaba los 185 minutos, mientras que con las unidades chinas el mismo recorrido puede hacerse en 160 minutos.
Esto supone un ahorro de entre el 15 y el 20 por ciento del tiempo en promedio en todas las líneas del STE. Y a ello se une la comodidad de los actuales trolebuses con respecto a los antiguos, que ya tenían más de 20 años de explotación, y algunos hasta 40.
En los nuevos trolebuses de fabricación china, "la gente va muy cómoda y tiene espacios sumamente amplios", afirmó López.
"No se tiene el nivel de saturación de las unidades anteriores por el mismo diseño, que tiene espacios más abiertos, asientos ergonómicos y ventilación", puntualizó.
Las expectativas del STE de la Ciudad de México con las unidades eléctricas chinas, a decir del director, "se han visto superadas" por su influencia positiva en el servicio, tradicionalmente libre de contaminantes.
"Se ve un beneficio para el ambiente en la ciudad. En los tres corredores exclusivos donde operamos no se ve contaminación por transporte público", manifestó.
La aplicación de la electromovilidad para el transporte público en la capital mexicana y Shanghai, opinó, guarda muchas similitudes en su esquema de operación, aunque las proporciones de una ciudad y otra sean distintas.
"Creo que ambas ciudades lo venimos haciendo bien, lo podemos perfeccionar, pero vamos bien", expresó, valorando que el avance tecnológico de China y su apuesta exitosa por la electromovilidad y el desarrollo verde en las ciudades a través del perfeccionamiento del transporte público debería inspirar a otras ciudades.
La única manera para lograr reducciones importantes en contaminantes es mediante la implementación de transportes masivos eficientes, eléctricos y accesibles para cualquier sector de la población, apuntó López.
En ese sentido, López considera que la noción china de comunidad de futuro compartido de la humanidad y la iniciativa de la Franja y la Ruta, con su apuesta por el desarrollo de infraestructuras, comunicaciones y nuevas conexiones en rutas marítimas y terrestres, plantean beneficios universales que pueden ser aprovechados por todos para el desarrollo verde de sus sistemas de transporte y su desarrollo en general.
Tener una mayor conexión y coparticipación entre China, México y otros países "permitiría una mayor integración de las naciones en todos los sectores", reflexionó.
"El beneficio es que cualquier persona, independientemente de sus ideales, de sus posiciones económicas y actividades, tendría acceso al mismo tipo de servicio", declaró el director general del STE. Esto llevará "un desarrollo mayor para todos los países, estados y regiones", finalizó.