La inauguración del primer Taller de Luban en África contribuye a hacer realidad los sueños de más jóvenes
El Taller de Luban en Yibuti se inauguró recientemente en la Escuela de Industria y Comercio de Yibuti, la mayor institución de formación vocacional de la región. Se trata del primer Taller de Luban establecido por China en África y dedicado a servir al desarrollo económico del ferrocarril Addis Abeba-Yibuti y el puerto comercial de Yibuti, y a brindar educación académica y formación profesional a los jóvenes africanos. A la ceremonia de inauguración asistieron cientos de personas, entre ellas el presidente de la República de Yibuti, Ismail Omar Guelleh, varios ministros del gobierno y el embajador chino en Yibuti, Zhuo Ruisheng, para presenciar este importante momento.
Los estudiantes locales realizan un simulacro de conducción de locomotora bajo la guía de profesores chinos. (Foto: Lv Qiang/Diario del Pueblo)
El establecimiento del Taller de Luban en África para brindar formación profesional a los jóvenes africanos es una medida concreta para implementar las "ocho acciones" de la Cumbre de Beijing del Foro de Cooperación China-África. Guelleh se felicitó por la inauguración del taller y dijo que actualmente Yibuti está desarrollando vigorosamente los sectores ferroviario, portuario y de aviación, y que los jóvenes formados por el Taller de Luban mejorarán en gran medida la competitividad del país. "La tecnología china traerá innovación a la educación e inyectará continuamente nueva vitalidad al desarrollo de Yibuti".
El Taller de Luban cultivará talentos para el proyecto del ferrocarril Addis Abeba-Yibuti y el desarrollo económico y social de Yibuti, lo que marca la apertura de un nuevo capítulo en la cooperación entre China e Yibuti en materia de formación profesional. Se espera que ambos países trabajen juntos para convertir el Taller de Luban en otro modelo de la cooperación entre China y África y de la cooperación Sur-Sur, y promover aún más la construcción conjunta de la Franja y la Ruta, afirmó Zhuo Ruisheng.
Un profesor chino está explicando la medición del ancho de la vía férrea a los estudiantes de ingeniería ferroviaria en el campo. (Foto: Lv Qiang/Diario del Pueblo)
El Taller de Luban adopta un modelo de cooperación multipartidista entre el gobierno, las escuelas y las empresas, y es construido conjuntamente por el Gobierno Popular Municipal de Tianjin, el Ministerio de Educación de Yibuti, la Escuela Técnica y Vocacional de Ferrocarriles de Tianjin, la Escuela Comercial No.1 de Tianjin, la Escuela de Industria y Comercio de Yibuti y la Corporación de Construcción de Ingeniería Civil de China (CCECC, por sus siglas en inglés). La primera fase del taller ha establecido 4 especialidades, entre ellas ferrocarril y negocios, que tienen una duración de 3 años. En la actualidad, la primera hornada de la especialidad de ferrocarriles tiene 24 estudiantes inscritos, y los cursos de negocios se dirigen directamente a la formación de los estudiantes de las escuelas vocacionales existentes.
El Taller de Luban dispone de varios espacios de enseñanza de alto nivel en la Escuela de Industria y Comercio de Yibuti, incluidas un área de práctica de operación ferroviaria y un área de práctica de similación de conducción de locomotora, así como una base para ejercicios prácticos fuera del campus en la estación de Najad, que es la estación de salida del ferrocarril Addis Abeba-Yibuti en Yibuti. Este reportero vio en la base que los estudiantes podían simular la conducción del tren y ensayar diversas situaciones de emergencia que se presentaban durante los ejercicios prácticos. Estos equipos de enseñanza experimentales permiten a los estudiantes combinar más estrechamente la teoría con la práctica, mejorando efectivamente el nivel de educación profesional en Yibuti, dijo Awad, profesor de logística de la Escuela de Industria y Comercio de Yibuti.
Camil, subdirector general de la compañía operadora conjunta del ferrocarril Etiopía-Yibuti, dijo que la base para ejercicios prácticos fuera del campus ha brindado un fuerte apoyo a la formación de talentos técnicos de alta calidad y la mejora de las capacidades del personal ferroviario, lo que puede servir mejor al proyecto del ferrocarril Addis Abeba-Yibuti. Aida Lowes, un empleado de la estación ferroviaria de Najad que había estudiado tecnología ferroviaria en la ciudad china de Tianjin, se mostró muy emocionado al saber que sus compatriotas podían hacer prácticas en esa base: "Antes ese aprendizaje solo podía completarse viajando miles de kilómetros, ahora se puede conseguir en mi propio país, y más jóvenes podrán hacer realidad su sueño”.