El consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, afirmó que China y Burundi deben mantener una comunicación y coordinación estrechas en los asuntos regionales e internacionales, y proteger con firmeza el multilateralismo, para así defender el interés común de ambos países y de las naciones en desarrollo en su conjunto.
En una conversación telefónica realizada el miércoles con el ministro de Asuntos Exteriores burundés, Albert Shingiro, Wang destacó que el nivel de las relaciones entre los dos países se mantiene alto, y ambos han forjado una confianza política mutua sólida al tiempo que la cooperación en multitud de campos ha cosechado buenos frutos.
Burundi se ha convertido en un amigo en cualquier tipo de circunstancia de China y también en un socio a todos los niveles, dijo Wang, y añadió que su país apoyará a Burundi, como siempre ha hecho, en la defensa de su soberanía nacional y la oposición a las injerencias externas.
Wang mostró su confianza en que Burundi seguirá al lado de China en temas que atañen a los intereses esenciales del país asiático.
La cooperación pragmática entre los dos países ha progresado de forma constante a pesar del impacto adverso de la pandemia de COVID-19, apuntó el alto funcionario chino.
China, dijo, quiere reforzar la cooperación y la comunicación con Burundi, y sintonizar la construcción conjunta de la Franja y la Ruta y la aplicación de los resultados de la Cumbre de Beijing del Foro de Cooperación China-África (FOCAC) con las seis tareas principales del país africano sobre desarrollo socioeconómico, entre ellas, el desarrollo de la agricultura y la ganadería, el apoyo a los jóvenes y la adopción de políticas efectivas, para así seguir reforzando la cooperación mutuamente beneficiosa entre los dos países.
Según enfatizó Wang, China apoya con firmeza la lucha de Burundi contra la pandemia y está dispuesta a seguirle ofreciendo apoyo y asistencia dentro de sus capacidades para que pueda superarla por completo lo antes posible.
Shingiro, entre tanto, agradeció a China su apoyo desinteresado al desarrollo socioeconómico burundés, un respaldo que, a su juicio, es una muestra perfecta de la profunda amistad del pueblo chino con el país africano.
Afirmó que su país aplicará resueltamente una política amistosa hacia China y continuará dándole apoyo en todos los asuntos que tienen que ver con sus intereses esenciales.
Burundi quiere trabajar con China para acelerar la construcción conjunta de la Franja y la Ruta, aplicar de forma adecuada los resultados de la Cumbre de Beijing del FOCAC y reforzar sin cesar la cooperación mutuamente beneficiosa en diferentes ámbitos, dijo.
