Kirguizistán aprecia la asistencia que le ha prestado China en el combate a la COVID-19 y pretende reforzar su cooperación con el país vecino en la época postpandemia, dijo el domingo el presidente kirguís, Sooronbai Jeenbekov.
Como dice un proverbio chino, es mejor un buen vecino que un pariente distante, afirmó Jeenbekov en una reunión con el consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, que efectúa una visita al país centroasiático.
Kirguizistán es un buen vecino y amigo de China, resaltó el presidente, y añadió que su país está muy agradecido a China por la ayuda que le prestó en el momento más difícil de la lucha contra el coronavirus, con el suministro de material y asistencia técnica, envío de expertos médicos e intercambio de experiencia.
Resaltó que la parte kirguís admira mucho la unidad del pueblo chino a la hora de superar con éxito la epidemia.
China está también a la cabeza en la investigación y desarrollo mundial de una vacuna y hará contribuciones nuevas e importantes a la lucha contra la enfermedad, señaló Jeenbekov.
Reiteró que Kirguizistán da un gran valor al concepto de una comunidad con un futuro compartido para la humanidad propuesto por el presidente chino, Xi Jinping.
Además, apuntó el mandatario, su país defiende con firmeza la política de una sola China, está al lado de China en los asuntos que atañen a sus intereses centrales y será siempre un amigo fiel de China.
Kirguizistán tiene la voluntad de trabajar con China para seguir promoviendo la construcción conjunta de la Franja y la Ruta y superar los efectos adversos del coronavirus en la economía, apuntó el presidente kirguís.
Agregó que su país busca expandir la cooperación pragmática con China en inversión, energía, transporte, agricultura y medicina, explorar nuevas áreas como comercio electrónico e inteligencia artificial, y acelerar la construcción del ferrocarril entre China, Kirguizistán y Uzbekistán.
Todo esto, destacó, fomentará un mayor desarrollo de la asociación estratégica integral entre los dos países, dijo Jeenbekov.
Wang, entre tanto, apuntó que la solidaridad y la cooperación son las armas más poderosas en la lucha contra la pandemia y también la mejor interpretación del concepto de una comunidad con un futuro compartido para la humanidad propuesto por Xi.
Vivimos en un mundo interconectado y debemos ayudarnos en tiempos de dificultad, dijo Wang, y agregó que el Gobierno chino ha puesto en marcha la mayor operación humanitaria desde la fundación de la República Popular China, con el envío de suministros de emergencia a más de 150 países, entre ellos Kirguizistán, y organizaciones internacionales.
A través de la solidaridad y la asistencia mutua, la humanidad podrá superar la epidemia, confió Wang, quien resaltó que China está dispuesta a seguir apoyando a la parte kirguís en su lucha contra la enfermedad, fortaleciendo la cooperación en materia de vacunas y respaldando al pueblo kirguís.
El consejero de Estado destacó que China valora el apoyo firme de Kirguizistán en temas relacionados con los intereses fundamentales chinos y también en la protección de su soberanía, independencia y dignidad nacional.
China apoya que Kirguizistán siga una senda de desarrollo adecuada a sus condiciones nacionales y se opone a que cualquier fuerza externa se inmiscuya en los asuntos internos kirguises, dijo.
Mostró confianza en que, con el liderazgo del presidente Jeenbekov, Kirguizistán mantendrá la estabilidad política y la armonía social, y seguirá avanzando hacia la modernización, abundó.
China está preparada para reforzar la cooperación en beneficio mutuo con Kirguizistán en la época postpandemia en conformidad con el importante consenso alcanzado por los dos jefes de Estado, y para abrir un capítulo nuevo en el desarrollo de las relaciones bilaterales, aseguró Wang.
