Con ayuda china se moderniza el puerto de Santiago de Cuba

2017-12-09 13:00:11 Fuente: China Hoy

Las banderas de Cuba y China ondean juntas en el puerto de Santiago de Cuba, donde se desarrolla un ambicioso proyecto de cooperación que convertirá a esa rada en la segunda más importante de la isla.

Iniciada en junio de 2015, la modernización del puerto de la oriental ciudad de Santiago, la segunda en importancia en la isla, está en plena etapa constructiva con un crédito de 120 millones de dólares concedido por China.

La bahía tiene un perímetro de más de 40 kilómetros, poco más de seis kilómetros de longitud y un área marítima cercana a los 12 kilómetros cuadrados, cuya profundidad promedio es de ocho metros y la máxima de 23, con un fondo de piedras y arena.

Allí, bajo el sol inclemente del Caribe, unos 200 hombres, entre chinos y cubanos, se afanan en un trabajo duro sin olvidar la calidad de la obra, que tiene una importancia económica cardinal para la isla.

“No había visto nunca trabajar con la velocidad y calidad con que se está trabajando en este puerto”, dice a Xinhua el ingeniero cubano Carlos Manuel Domínguez, un hombre con más de dos décadas de experiencia que durante varios años construyó hoteles para el turismo en el balneario de Varadero.

Domínguez labora ahora con la empresa China Communications Construction Company Ltd. (CCCC) encargada de la modernización del muelle ubicado entre los ríos Gascón y Yarayó, al noroeste de una bahía que es custodiada por la mítica Sierra Maestra.

El ingeniero, un santiaguero de pura cepa que admira la cultura china, explica que ahora se está construyendo el muelle sobre cual se colocarán las grúas para la descarga de los buques sobre los trenes que llegarán hasta ese lugar.

El nuevo muelle multifuncional tendrá un atraque de hormigón armado de cerca de 250 metros para la carga y descarga de buques, mediante cinco grúas de pórtico de avanzada técnica, tres de 50 toneladas de capacidad y otras dos de 30.

Cuando a mediados del próximo año concluyan las obras, el muelle podrá operar 565.000 toneladas al año, entre mercancía general, contenedores y productos a granel, lo cual lo ratifica como el segundo en importancia del país, solo superado por el de Mariel, al noroeste de La Habana.

Domínguez señala que de manera simultánea se levantan dos almacenes techados con capacidad para asimilar 5.040 toneladas de carga general y 10.080 de carga seca.

Además habrá un área de almacenamiento al aire libre para la recepción de contenedores de todo tipo, plaza que incorporará a las operaciones otros avanzados equipos de izaje, tracción, transporte y recursos que aseguren prestaciones portuarias con la calidad y rapidez que hoy demanda el comercio mundial.

El puerto tendrá conexión con el resto del país tanto por ferrocarril como por carretera, mediante accesos que se extenderán hasta el nuevo enclave, proyecto que incluye un avanzado sistema de pesaje de las cargas e instalaciones administrativas, todas equipadas con modernos medios informáticos de comunicación y otras facilidades para el servicio.

En la bahía se realizaron también labores de dragado hasta alcanzar unos 14 metros de calado para el acceso al nuevo muelle, profundidad que facilitará el arribo de buques de hasta 55.000 toneladas, lo que supera los de un máximo de 30.000 que se operan en la actualidad.

El dragado tuvo en cuenta el canal interior, la dársena de maniobra, los canales secundarios y cajones de atraque de varios espigones.

Dentro de la abrigada bahía santiaguera están ubicadas numerosas industrias de alta trascendencia para la economía cubana, como una fábrica de cemento, una refinería de petróleo, dos astilleros, molinos de trigo, un frigorífico para las capturas de la pesca y otras instalaciones portuarias enlazadas con el nudo ferroviario de transporte intermodal.

Edición: Liu Gehuan