BUENOS AIRES, 8 dic (Xinhua) -- Al abrazar un crecimiento económico de alta calidad, China se alza como un motor fundamental para revitalizar la economía mundial, sostuvo hoy la economista argentina Antonella Gervagi.
La investigadora en el Centro de Estudios de Argentina-China (Ceach) de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires destacó que el viraje que está dando China hacia un desarrollo de "alta calidad" no solo fortalecerá su panorama interno, sino que también ofrece una oportunidad sin precedentes para impulsar la economía global, a través de iniciativas exteriores como la iniciativa de la Franja y la Ruta.
"La iniciativa de la Franja y la Ruta conecta a los países, genera comercio internacional, mejora la productividad, sin duda ayuda al crecimiento económico y, además, cuando uno dialoga, comercia, se conoce con otros países, fomenta vínculos más estrechos", expuso Gervagi en una entrevista con Xinhua.
Según la economista, esta mirada de China al exterior es complementaria con una nueva visión que pone el foco en el agregado de valor y en el desarrollo estratégico de sectores como la ciencia, la tecnología y la innovación.
"Para poner en contexto el crecimiento de la economía china, en los años de 1970 se generó una apertura hacia el exterior y el país comenzó a exportar muchísimos bienes, quizás de una calidad no tan alta, sino de una producción más masiva", explicó Gervagi.
"Este modelo hizo que China creciera a unas tasas muy elevadas durante bastantes años, y en los recientes años se intentó virar de ese modelo de producción masiva, quizás sin tanto valor agregado, hacia un modelo que ponga más valor agregado a lo que se está produciendo en el país", continuó.
Este cambio, según la experta, no solo fortalecerá las exportaciones chinas, sino que también generará un círculo virtuoso con un mercado interno más robusto, contribuyendo así al crecimiento económico global.
"Esto conlleva también a unos salarios más elevados, entonces China, además de exportar al exterior, va a contar con un mercado interno más fortalecido que también generaría un círculo virtuoso hacia el crecimiento de más alta calidad", agregó.
La investigadora subrayó que este cambio de enfoque hacia la calidad implica dar continuidad a la inversión en investigación y desarrollo, así como en infraestructura tecnológica, sin descuidar las políticas fiscal y monetaria, que son clave para preservar la macroeconomía.
En esa línea, señaló que el viraje dado por China no solo propicia un crecimiento más sostenible, sino que también la posiciona como un referente para otros países en búsqueda de modelos económicos más resilientes y avanzados.
Al abordar la percepción global sobre el mercado chino, Gervagi afirmó que la confianza de los países fluctúa según determinadas políticas internacionales. En ese sentido, indicó que pese a los desafíos como el proteccionismo, el mercado chino, con su considerable cantidad de consumidores y trabajadores con salarios en aumento, se proyecta positivamente.
En relación a las perspectivas de la economía china para el 2024, Gervagi reconoció que, a pesar de las incertidumbres globales, el país asiático continúa en un sendero de crecimiento y también mantiene su posición como un actor crucial para el crecimiento mundial.
"Venimos de una crisis bastante marcada para toda la economía mundial y China ha sido un motor de crecimiento muy importante que ha generado que la economía global no de números tan negativos como se esperaba", dijo.
La analista abogó por el diálogo entre países, una mayor cooperación y proyectos como la iniciativa de la Franja y la Ruta, como catalizadores esenciales para fortalecer las relaciones comerciales internacionales. Este enfoque, según Gervagi, no solo fomenta la comprensión mutua sino que también propicia la colaboración en investigación y desarrollo, generando sinergias beneficiosas para todos los involucrados.
"Comparto totalmente la iniciativa de la Franja y la Ruta, la iniciativa de los bancos de financiamiento para el desarrollo chino, el que se esté comerciando ya no sólo con dólares, sino con yuanes, por ejemplo, en Argentina, que tenemos una escasez de dólares. Todas esas iniciativas ayudan a los países latinoamericanos y a otros países subdesarrollados a superar ciertos obstáculos y poder ir hacia un sendero de crecimiento", concluyó Gervagi.
