ESPECIAL: Ecuatorianos destacan la prosperidad que trajo hidroeléctrica construida por China

2023-02-26 10:24:04 Fuente: Agencia de Noticias Xinhua

Empleados trabajan en uno de los túneles del proyecto hidroeléctrico Coca Codo Sinclair, en el Chaco, provincia del Napo, Ecuador, el 7 de abril de 2015. (Xinhua/Str)

EL CHACO, Ecuador, 25 feb (Xinhua) -- Seis años después de que la empresa china Sinohydro inauguró la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair (CCS), la más grande en la Amazonía de Ecuador, los habitantes del recinto San Luis, ubicado en la zona de influencia del proyecto, mantienen vivo el recuerdo de la prosperidad que alcanzaron con el desarrollo de esta megaobra.

"Era muy bueno, buen tiempo fue ese de la empresa en sí en los trabajos, porque había mucha gente, mucho movimiento aquí para todos, ganamos mucha plata", dijo en un reciente diálogo con Xinhua, Nancy Chicaiza, una comerciante y dirigente barrial de San Luis.

En este poblado, perteneciente a la parroquia Gonzalo Días de Pineda, del cantón El Chaco, en la provincia de Napo (nororiente), residen actualmente unas 55 familias en modestas casas donde han improvisado pequeñas tiendas de víveres, venta de comida y panaderías como medio de trabajo en una zona rodeada de verdes montañas, cascadas y ríos.

La construcción de la represa, de 1.500 megavatios de potencia, inició en julio de 2010 entre las provincias de Napo y Sucumbíos (este) y fue inaugurada el 18 de noviembre de 2016, convirtiéndose en la fuente de energía más grande de Ecuador.

El desarrollo del proyecto cambió la vida en San Luis, pues su población se incrementó con la llegada de ciudadanos chinos y ecuatorianos de zonas aledañas al proyecto para construir la hidroeléctrica.

A raíz de que vino Sinohydro esto se fue agrandando, porque Sinohydro trajo unas 4.000 personas aquí y de ahí fue creciendo el pueblo, agregó Chicaiza, quien vive 12 años en la localidad.

Según la Alcaldía de El Chaco, más de 7.500 trabajadores ecuatorianos participaron en la construcción de la represa, generando así fuentes de empleo y mejorando la calidad de vida de cientos de familias.

Chicaiza, dijo que extrañaba los días en que la empresa china estaba presente, pues trajo prosperidad para el pueblo.

"Estoy muy agradecida porque Sinohydro nos ha ayudado bastante. Yo di educación a mis tres hijos, todos son universitarios", comentó la mujer afuera de su vivienda donde tiene una tienda, ubicada a pocos pasos del campamento de trabajo de la empresa china.

Chicaiza, añadió que en esa época, Sinohydro le compraba gallinas que cría en un pequeño espacio en su vivienda, además de víveres.

"Compraban de todo, sí me han ayudado, yo estoy muy agradecida con la empresa", subrayó, añadiendo que debido a la mejora económica que alcanzó en ese tiempo, su madre, que era la anterior dueña de la tienda, también prosperó.

"Yo le puedo decir que mi mamá se compró un carro, por ahí se paseaba mucho", indicó, tras señalar que su madre, de avanzada edad, decidió luego dejar San Luis.

Desde entonces, Chicaiza se hizo cargo de la tienda a la que acuden a comprar sus vecinos con quienes vive en comunidad en esta cálida zona del oriente ecuatoriano.

También Adriana Carranza, una madre soltera con dos hijos y residente en San Luis, dijo a Xinhua que tiene gratos recuerdos de sus días trabajando como asistente de cocina entre 2012 y 2015 para (un subcontratista de) Sinohydro en la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair (CCS).

"Tengo una bonita experiencia porque gracias al trabajo que hice durante el tiempo de Sinohydro pude ahorrar dinero. Sinohydro ha sido la empresa que más me ha pagado por las horas extras", relató Carranza visiblemente contenta.

Trabajadores de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair reaccionan durante el inicio de operaciones, en El Chaco, provincia de Napo, Ecuador, el 13 de abril de 2016. (Xinhua/Str)

Indicó que el trabajo era bien remunerado y había buenas condiciones, ya que incluso en esa época quedó embarazada y temía ser despedida, lo cual no sucedió.

Al contrario, contó que gracias al buen ambiente laboral y la comprensión de su jefe chino bajó el ritmo de trabajo y recibió atención médica para llegar en buenas condiciones al parto.

Añadió que trabajar como asistente de cocina fue una bonita experiencia que nunca olvidará, ya que jamás en su vida había preparado comida china ni tampoco entendía el idioma chino.

"Yo en mi vida había cocinado comida china y era una novedad para nosotros, fue algo impactante, y al mismo, tiempo sentimos una alegría porque nunca habíamos comido eso, sólo habíamos visto en videos, en fotos, en lo que pasan en las películas" y de pronto "estábamos viviendo nosotros este proceso", señaló.

Además, fue un desafío entender a su jefe, un cocinero chino que no hablaba español, no obstante, con el paso del tiempo y la convivencia diaria, la comunicación iba fluyendo de mejor manera.

"Pero yo admiro bastante la capacidad de los chinos, porque poco a poco el proceso avanza. Cuando él se fue (de Ecuador), él hablaba como nosotros, era un ecuatoriano más (...), él entendía lo que hablábamos y nos contestaba", dijo la mujer entre risas.

Estas historias se repiten entre los pobladores de San Luis, que además de prosperar económicamente durante la construcción de la represa han recibido muchos beneficios sociales, así como la mejora de servicios y carreteras.

De acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas de Ecuador, CCS benefició directamente a más de 20.000 habitantes de los cantones El Chaco y Gonzalo Pizarro, situados en la zona de influencia del proyecto, con la implementación y mejoramiento de sistemas de alcantarillado, agua potable y tratamiento de desechos.

Asimismo, brindó apoyo en la infraestructura en varios centros educativos, mejoramiento y ampliación del servicio eléctrico.

La hidroeléctrica también ha traído beneficios a nivel país, ya que cubre el 35 por ciento de la demanda nacional de energía eléctrica, aprovechando las aguas del río Coca, que resulta de la confluencia de los ríos Quijos y Salado.

Según información publicada en tiempo real por el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE), hasta las 19:00 hora local de este sábado, la central aportaba con el 32 por ciento en la producción de energía hidroeléctrica en todo el país sudamericano, lo que demuestra su importancia para la estabilidad energética de Ecuador.

El pasado 13 de enero, la hidroeléctrica batió su propio récord al generar el 49 por ciento de la energía total que el país necesitaba, según la empresa Sinohydro que calificó este hecho como un "hito histórico".

La central hidroeléctrica, que está funcionado sin problemas durante poco más de seis años, también ha reforzado la soberanía energética de Ecuador, pues el país ya no depende de la energía importada.

Por el contrario, se ha convertido en un exportador de energía en cantidades significativas a Colombia y Perú.

Además, Coca Codo Sinclair ha logrado por primera vez en la historia de Ecuador, junto con otras centrales hidroeléctricas, transformar la matriz energética, con más del 90 por ciento de electricidad generada por el agua.

Edición: Lu Jiaqi