ESPECIAL: Peculiar composición a través del color en vez del trazo de artista china Liu Chun llega a España

2024-03-08 16:56:28 Fuente: Agencia de Noticias Xinhua

MADRID, 7 mar (Xinhua) -- La obra de la artista china Liu Chun y su delicada fusión de la pintura tradicional de su país con las vanguardias occidentales se puede ver estos días en España para descubrir una manera singular de componer "con el color más que con el dibujo".

En el marco de la Semana del Arte 2024, que se celebra del 6 al 10 de marzo en la capital española, Madrid, con eventos de gran repercusión nacional e internacional, los cuadros fau-expresionistas, como los han definido los expertos, de Liu Chun se exponen en la decimoquinta edición de la feria JustMad en el histórico Palacio Neptuno.

"Me ha sorprendido porque compone más con el color que con el dibujo, pues siendo el suyo un planteamiento muy dibujístico, donde el pigmento se diluye en agua y el dibujo sería casi el primer elemento que se construye, aquí se construye mucho con la veladura y el color", explicó hoy jueves a Xinhua en la exposición el reconocido artista español Andrés Alcántara.

Alcántara, uno de los pocos escultores españoles que todavía realiza talla directa, ve en la obra de Liu Chun, que además de pintora es directora y productora de cine, "influencias de las vanguardias, pero también de la pintura al agua china, que tiene una tradición milenaria".

"El monocromatismo que caracteriza a la pintura china aquí lo rompe con los colores, por ejemplo en las hojas, en los fondos, hay mucha idea del paisaje chino, pero por otra parte tiene una composición muy impresionista, muy (Édouard) Manet, (Claude) Monet, incluso ese toque de (Henri de) Toulouse-Lautrec, porque dibuja bien con el color", aseveró.

En un recorrido por la muestra, que se puede ver hasta el próximo domingo, se aprecia el contraste entre color y trazo, a veces incluso furibundo como en el fauvismo, del estilo de Liu Chun, resultado de esa fusión de elementos chinos y occidentales.

La artista, autodidacta y que expuso su obra por primera vez en España el pasado septiembre en el Museo Europeo de Arte Moderno de Barcelona, bebe de la influencia tanto de los pioneros del arte chino moderno, como Liu Haisu, Lin Fengmian o Wu Guanzhong, como de los grandes nombres de las vanguardias occidentales, Manet, Monet y también Vincent Van Gogh y Marc Chagall.

"La formación es relativa siempre, porque todos tenemos formación, sin información sensorial no se puede construir nada. Uno siempre tiene que partir de una idea, bien esa idea esté formada en un taller copiando o no, pero siempre hay referencias anteriores", consideró Alcántara.

En este sentido, continuó, "el arte tiene que ver sobre todo con la historia del arte" y "todo se retroalimenta", aunque "nosotros hemos estado muy aislados del arte chino y el arte japonés casi hasta el siglo XIX".

"Ya en el siglo XIX el mismo (Paul) Cézanne, el mismo (Paul) Gauguin, el mismo Van Gogh, se inspiraron en el paisaje chino", apostilló.

Otro de los asistentes a la exposición esta jornada fue el marchante de arte español Jesús Martín, quien recalcó a Xinhua que "es muy difícil entrar en el mercado europeo porque tenemos una visión muy soberbia de cualquier otra cultura, y esa soberbia es una barrera impresionante para admitir disfrutar de otras alternativas, otros puntos de vista".

En estos tiempos, agregó, "todo viene a ser fusión, es muy difícil que ellos no se empapen de lo nuestro y nosotros no nos empapemos de lo de ellos".

"Explicar el arte es hablar 'por boca de ganso' (repetir conocimientos sin análisis ni crítica). El arte es algo que se explica con el arte. El lenguaje del arte es el arte, cualquier explicación siempre está de más", sentenció Alcántara, quien en 2008 expuso su obra en la urbe oriental china de Shanghai.

Durante su estancia en el país asiático, donde llevó sus esculturas y pinturas de dragones, alineadas con retratos de Miguel de Cervantes y su Quijote, recuerda en especial su paso por la calle tradicional de Liulichang, en la capital china, Beijing, repleta de establecimientos donde comprar pinceles, tinta, papel y tinteros, los conocidos como cuatro tesoros del estudio.

Sin hablar el idioma, llegó a un comercio y pidió, gesticulando, pinceles y tinta china, ante el asombro del propietario, que le puso ante sí un lienzo, le pidió que pintara y, al ver que sabía hacerlo, le mostró cómo escribir caracteres chinos y accedió a venderle lo que necesitaba.

Edición: Lu Jiaqi